Es tiempo de libros por el suelo,
de mezclar elefantes con cigüeñas,
de no cruzar en rojo,
de ser invisible y el mundo entero,
de observar y sonreír,
de inventar y leer,
de abrazos inesperados y canciones desafinadas,
tiempo de guardar
para cuando llegue la era
de los secretos
y las puertas cerradas.
Aquí y ahora.